Juan Antonio González Fuentes
Estos días estoy con Henry Adams. Quiero decir que estoy leyendo a Henry Adams, y más concretamente el libro que no hace mucho fue elegido por la crítica estadounidense como la mejor obra de la literatura norteamericana, La educación de Henry Adams (Alba Editorial), la personalísima autobiografía del autor.
Adams nació en Boston en 1838, biznieto del que fue segundo presidente de la Unión, nieto del sexto, e hijo de congresista y diplomático, es decir, un representante puro de la más alta élite de la clase wasp (white, anglo-saxon and protestant –blanco, anglosajón y protestante-) norteamericana.
Henry Adams: La educación de Henry Admas (Alba Editorial, 2009)
Nuestro autor estudió en la prestigiosa Universidad de Harvard, y luego amplió sus estudios de leyes en Berlín. Trabajó como diplomático en Londres, donde intimó con bastantes de las más relevantes personalidades de la vida social y cultural de la capital británica, Dickens o Lyell incluidos. Regresó a los EEUU, y más concretamente a la ciudad de Washington, donde se dedicó a enseñar historia y a publicar algunos libros literarios y sobre la historia norteamericana que le valieron la celebridad y la estima intelectual de sus conciudadanos. Trabajos como Democracy (1880), Esther (1884) y Letter to American Teachers of History (1910) avalan la labor de Henry Adams como uno de los grandes literatos estadounidenses de su tiempo.
Sin embargo el libro por el que Henry Adams es recordado es la ya mencionada autobiografía, La educación de Henry Adams, por la que el autor recibió en 1918, a título póstumo, el premio Pulitzer, justo seis meses después de su muerte. A lo largo de las más de 500 páginas de la edición española editada con cuidado por la barcelonesa Alba, Henry Adams aporta un testimonio directo, y sobre todo privilegiado, de cómo fue, cómo se hizo la historia de los EEUU a lo largo y ancho de todo el siglo XIX. Esta autobiografía no sé si será la mejor obra de la literatura norteamericana (mucho decir me parece), pero desde luego es un documento absolutamente imprescindible para adentrarse en el primer siglo de vida norteamericana, para empezar a saber algo de la historia del imperio ejerciente en la actualidad como tal.
Últimas colaboraciones de Juan Antonio González Fuentes en Ojos de Papel:
-LIBRO: Jesús Pardo, Borrón y cuenta vieja (RBA Libros, 2009)
NOTA: En el blog titulado El Pulso de la Bruma se pueden leer los anteriores artículos de Juan Antonio González Fuentes, clasificados tanto por temas (cine, sociedad, autores, artes, música y libros) como cronológicamente.