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lunes, 19 de enero de 2009
¿Qué es recesión en Rusia?
Autor: La mirada al Este - Lecturas[7014] Comentarios[0]
Por alguna razón, la noticia de que Rusia ha entrado en recesión no ha causado ninguna sorpresa ni entre la comunidad de expertos ni entre las masas o los representantes de la autoridad. O ya lo esperaban y por eso a nadie le sorprendió, o nadie imagina cómo nos puede afectar

Valeria Mingova es periodista especializada en economía. Trabaja en la sección de finanzas del diario Respublika y reside en Moscú

Por Valeria Mingova (Moscú)

Por alguna razón, la noticia de que Rusia ha entrado en recesión no ha causado ninguna sorpresa ni entre la comunidad de expertos ni entre las masas o los representantes de la autoridad. O ya lo esperaban y por eso a nadie le sorprendió, o nadie imagina cómo nos puede afectar.

Nadie dudaba que Rusia se encaminaba hacia la recesión, pero preferimos aferrarnos a la esperanza de las bravas declaraciones del Gobierno acerca de que “la crisis rusa está en las bolsas y terminará a comienzos de 2009”, y pensar que los representantes del Gobierno ruso estaban en lo cierto cuando bombeaban dinero hacia los bancos.

El sector bancario o, como es también conocido, el sistema circulatorio de la economía sobrevivió. Más aún, hoy en día, el sistema está saturado de liquidez y ni las obligaciones ni los activos de los bancos han sufrido crisis alguna. Pero esto no es ni bueno ni malo. Al dar dinero a los bancos, el Gobierno esperaba obtener a cambio una reactivación de la actividad económica, créditos a la actividad productiva, pero el dinero ha terminado encerrado en sus depósitos y no lo han compartido con nadie.

Por una parte, la decisión fue correcta. El superávit no es lo suficientemente grande para “poner a todos a cuenta”, y, si ocurre así, el dinero se termina y nadie puede sacar más. Pero por otra, ¿quién necesita un sistema bancario fuerte si los mecanismos crediticios están congelados y, peor aún, no tenemos a nadie a quien otorgar créditos? La producción se va a detener y nadie quiere o puede comenzar nuevas empresas. Y las que tenemos van a quebrar o vender y deslocalizar sus inversiones.

Pozo petrolífero ruso (Wikipedia)

Pozo petrolífero ruso (Wikipedia)

Mientras tanto, la crisis era considerada un problema de los mercados financieros. Sólo que los principales economistas del país subestimaron, parece, el hecho de que la crisis podía trasladarse a la economía real. Por eso no estaba listo el airbag de nadie. Y cuando, finalmente, el crecimiento industrial cayó un 8,5% en noviembre, comenzaron a alarmarse y declararon que la recesión estaba comenzando. Me parece a mí que de bene esse.

Por los libros de economía, sabemos que la recesión consiste en la reducción de la economía y de la producción industrial. Pero, ¿a la reducción de qué producción industrial nos referimos cuando hablamos de Rusia? O más exactamente, ¿a qué tipo de industria nos referimos? Según las estadísticas, los primeros lugares en la industria los ocupan las de la producción de petróleo, carbón, gas y metales pesados, su procesamiento y su distribución. Y, muy por detrás, tenemos a la metalúrgica, la alimenticia, la construcción y la fabricación de automóviles.

Un PIB debilitado

Pero miremos más de cerca estos datos. Por ejemplo, qué podríamos imaginar al hablar de recortes en la producción de materiales de construcción cuando no eran, ni son ahora, suficientes para terminar los proyectos iniciados. Lo compramos todo en los países europeos. Más todavía, difícilmente encontrarán a nadie en Rusia que niegue que la mayor parte de los alimentos que consumimos procede de la importación y que la producción de comida en Rusia es sólo una pequeña parte de lo que se consume.

El mismo problema, lo tenemos con la microelectrónica, la producción aeronáutica, el sector de las telecomunicaciones y el de materias primas. Todo esto es PIB real, y en esto es en lo que debería consistir el PIB, tomado como un indicador real del desarrollo de un país, no como una bonita cifra que podemos enseñarle a todo el mundo presumiendo. De hecho, el crecimiento del PIB se debió exclusivamente a los precios del petróleo y el gas. Todo aquello relacionado con el abastecimiento energético se ha desarrollado sólo gracias a los altos precios de la energía.

Por cierto, la idea de que el PIB ruso crece gracias al petróleo y el gas se ve confirmada por las acciones del Gobierno. Es precisamente ahora cuando se empiezan a preocupar por el sector del gas y el petróleo. Los precios han caído y es por eso que se ha declarado la recesión en Rusia, el encogimiento del crecimiento económico. Y es nuestra caída productiva lo que deberían combatir en este momento. Y es por eso que, hace unos días, el primer ministro Vladimir Putin anunció otro plan para salvar la economía rusa, explicando que el Gobierno está desarrollando un nuevo plan para apoyar a… ¿a quién? A Gazprom, por supuesto. Otra producción de la carecemos.

(Texto traducido por Pablo Veyrat)


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