Director: Rogelio López Blanco      Editora: Dolores Sanahuja      Responsable TI: Vidal Vidal Garcia     
  • Novedades

    Wise Up Ghost, CD de Elvis Costello and The Roots (por Marion Cassabalian)
  • Cine

    Buried (Enterrado), película de Rodrigo Cortés (por Eva Pereiro López)
  • Sugerencias

  • Música

    Sleep Through the Static, CD de Jack Johnson (crítica de Marion Cassabalian)
  • Viajes

  • MundoDigital

    Por qué los contenidos propios de un web son el mayor activo de las empresas en la Red
  • Temas

    El malestar de Oriente Próximo
  • Blog

  • Creación

    Los crímenes del número primo (por Reyes Calderón)
  • Recomendar

    Su nombre Completo
    Direccción de correo del destinatario
miércoles, 10 de febrero de 2010
Los privilegios de los diputados españoles
Autor: Juan Antonio González Fuentes - Lecturas[9450] Comentarios[3]
En este negro, negrísimo escenario, nuestros diputados se incorporan hoy a las tareas tras 48 días de “trabajo” en la ausencia. Imagino que durante este periodo temporal no habrán dejado de cobrar sus abultadas nóminas, algunos habrán cogido gratuitamente aviones o trenes públicos por su condición de diputados, y presumo que las “vacaciones” no influirán para nada en que tras dos legislaturas como Señorías tengan derecho a cobrar la máxima pensión del Estado español (es decir, mientras el gobierno piensa en ampliar a 25 los años de trabajo cotizado para que cualquier mindundi pueda cobrar una pensión de unos cientos de euros, a los diputados les basta con serlo ocho años para cobrar lo más de lo más


 

Juan Antonio González Fuentes

Tengo algunos amigos y amigas diputados y diputadas en Madrid (qué largo es lo de la corrección política!!!). Así que hoy han reiniciado su vida parlamentaria pública, tras creo que 48 días de asueto, más o menos desde Navidad hasta esta misma mañana.

Cuando al presidente del Parlamento, el señor José Bono, le ha preguntado esta mañana algún periodista si no le parecía que dicho periodo “vacacional” es de por sí prolongado e injustificado, pero mucho más en tiempos de terrorífica crisis económica y con un país por el que todos los días deambulan 4 millones de desempleados oficiales, el señor Bono ha respondido sin disimular su enfado que los señores y señoras diputados no han estado de “vacaciones”, pues aunque no hayan tenido sesiones parlamentarias, sí han estado trabajando en sus despachos y “en sus cosas”. Y ha cerrado su intervención el señor Bono recordando que ese tipo de comentarios y críticas son un ataque directo a la Democracia.

El señor Bono y sus palabras justificativas de lo injustificable se descalifican a sí mismas sin necesidad ninguna de añadirles otros vocablos gruesos o soeces, aunque realmente, tras oír semejante suma de lugares comunes y banalidades, a uno le entran ganas de echarse a la cara al bueno de Bono y lanzarle a la jeta tres o cuatro barbaridades bien desmedidas e hirientes.

Pero los siempre previsibles sin sentido de Bono sí esconden o tapan una realidad palpable y marmórea. La casta política en España ni tolera la crítica ni tolera que se cuestionen sus privilegios de todo tipo como tales, y se escuda tras el burladero de la Democracia cuando el bravo toro de la indignación popular salta al ruedo buscando carne en la que afilar el cuerno.

José Bono (foto de Helene C. Stikkel en wikipedia)

José Bono (foto de Helene C. Stikkel en wikipedia)

España vive una de las peores y más desesperantes tragedia económicas de las últimas décadas, tragedia a la que además no se le ve solución a corto plazo. Los empleos se destruyen por miles día a día, también día a día desaparecen centenares de empresas pequeñas y medianas que debe echar el cierre por KO técnico y financiero. Los pobres crecen de manera exponencial, y los sueldos cada vez dan para menos. A los jubilados por vez primera se les baja la pensión, a todos los que trabajamos se nos suben los impuestos, y todos los recibos suben sin aparente control (la luz, el agua, la hipoteca, el teléfono...). Se anuncia que la edad de jubilación se va a retrasar en al menos dos años, y quizá mi generación, para cobrar algún día una pensión, deba trabajar y cotizar diez años más de los ahora establecidos.

Podría seguir con este listado de tristezas y tragedias cotidianas durante un paquete de folios más, pero para hacernos un idea del panorama funesto considero que ya es bastante lo aducido. Pues bien, en este negro, negrísimo escenario, nuestros diputados se incorporan hoy a las tareas tras 48 días de “trabajo” en la ausencia. Imagino que durante este periodo temporal no habrán dejado de cobrar sus abultadas nóminas, algunos habrán cogido gratuitamente aviones o trenes públicos por su condición de diputados, y presumo que las “vacaciones” no influirán para nada en que tras dos legislaturas como Señorías tengan derecho a cobrar la máxima pensión del Estado español (es decir, mientras el gobierno piensa en ampliar a 25 los años de trabajo cotizado para que cualquier mindundi pueda cobrar una pensión de unos cientos de euros, a los diputados les basta con serlo ocho años para cobrar lo más de lo más. Por cierto, la diputada de UPyD, Rosa Díez, ya ha denunciado la indecencia, y ha propuesto que tan demencial absurdo sea corregido o desaparezca).

Sí, ya sé que me dirán muchos que esto es pura demagogia, y que meter mano en asunto tan minoritario a nadie le va a solucionar la vida, y menos a todo un país. Estoy de acuerdo, pero también lo estoy en que si los señores diputados se bajasen el sueldo, si recortasen sus prebendas y privilegios de casta, y si para cobrar una pensión tuvieran que cotizar como cualquier otro español, muchos de sus más desvalidos conciudadanos sentirían una cierta satisfacción y no se sentirían tan vejados y ofendidos en su dignidad por tan injustificables privilegios. Y ojo, estoy seguro que el recorte en tales gastos produciría el ahorro suficiente como para que varias decenas o centenas de españoles como mi madre, no vean rebajadas sus pensiones en cantidades tan absurdas como 16 euros al mes.  

***

Últimas colaboraciones (FEBRERO 2010) de Juan Antonio González Fuentes en la revista electrónica Ojos de Papel:

LIBRO: Oliver Matuschek: Las tres vidas de Stefan Zweig (Papel de Liar, 2009)

LIBRO (enero 2010): Alex Ross: El ruido eterno. Escuchar al siglo XX a través de su música (Seix Barral, 2009)

CINE (enero 2010):  James Cameron: Avatar (2009)

LIBRO (diciembre): Gerald Martin: Gabriel García Márquez. Una vida (Debate, 2009)

-LIBRO (noviembre): Miklós Bánffy: Los días contados (Libros del Asteroide, 2009)

-CINE (noviembre): Woody Allen: Si la cosa funciona (2009)

-LIBRO (octubre): Luis García Jambrina: El manuscrito de piedra (Alfagaura, 2008)

-CREACIÓN (octubre): La lengua ciega (DVD, 2009)

-CINE (octubre): Isabel Coixet: Mapa de los sonidos de Tokio (2009)

-LIBRO (septiembre):  P.D. James: Muerte en la clínica privada (Ediciones B, 2009)

-LIBRO (julio): Stieg Larsson: Millennium 3. La reina en el palacio de las corrientes de aire (Destino, 2009)

-PELÍCULA (julio)Niels Arden Oplev: Millennium 1: Los hombres que no amaban a las mujeres (2009)

Más de Stieg Larsson:

-Millenium 1. Los hombres que no amaban a las mujeres (Destino, 2008)

-Millennium 2. La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina (Destino, 2008)


NOTA: En el blog titulado El Pulso de la Bruma se pueden leer los anteriores artículos de Juan Antonio González Fuentes, clasificados tanto por temas (cine, sociedad, autores, artes, música y libros) como cronológicamente.


Comentarios
18.02.2010 15:37:15 - enrique vidaurreta



Hay que empezar por reducir desde lo más alto funcionarios estatales y comunitarios, consejeros, asesores etc. suprimir todos los gastos suntuarios, bajar sueldos, complementos, privilegios etc. Castigar la corrupcion politica, despolitizar la justicia y una comisión de personas honradas y con un poco de inteligencia hacer un plan para sacar adelante la situación, reformando lo que haga falta.Sacrificio de la clase politica, dirigentes y del pueblo, la tardanza llevará a un desastre trágico para España.


18.02.2010 15:37:21 - enrique vidaurreta



Hay que empezar por reducir desde lo más alto funcionarios estatales y comunitarios, consejeros, asesores etc. suprimir todos los gastos suntuarios, bajar sueldos, complementos, privilegios etc. Castigar la corrupcion politica, despolitizar la justicia y una comisión de personas honradas y con un poco de inteligencia hacer un plan para sacar adelante la situación, reformando lo que haga falta.Sacrificio de la clase politica, dirigentes y del pueblo, la tardanza llevará a un desastre trágico para España.


18.02.2010 15:37:23 - enrique vidaurreta



Hay que empezar por reducir desde lo más alto funcionarios estatales y comunitarios, consejeros, asesores etc. suprimir todos los gastos suntuarios, bajar sueldos, complementos, privilegios etc. Castigar la corrupcion politica, despolitizar la justicia y una comisión de personas honradas y con un poco de inteligencia hacer un plan para sacar adelante la situación, reformando lo que haga falta.Sacrificio de la clase politica, dirigentes y del pueblo, la tardanza llevará a un desastre trágico para España.










  • Suscribirse





    He leido el texto legal


  • Reseñas

    Los atentados de Madrid en la opinión pública árabe (reseña de Rogelio López Blanco)
  • Publicidad

  • Autores