Neil Hannon transmite a todo lo que hace su extrema sensibilidad y
su simpática vitalidad. Su música es a la vez romántica con un toque nostálgico,
y dinámica con mucho humor. Todo lo que toca lleva su sello personal, como si de
una obra de teatro se tratará, una comedia a veces más trágica que cómica que
explica sin duda el nombre de la banda que fundó en 1989.
The Divine Comedy: “Tonight We Fly” (vídeo colgado
en YouTube por elbioubiou)The Divine Comedy se caracteriza
por una música muy melódica (casi sinfónica) y un piano omnipresente que
recuerda a veces a
Tom
Waits. Sin embargo la voz clara y el acento impecable de este
irlandés del norte en traje y camisa blanca (y bombín en su último álbum), le
dan esta faceta tan elegante a unos temas originales y fieles a la imagen de su
líder incontestable.
La música es potente con unos ritmos que dan ganas
de bailar, reír y gritar (escuchar sin falta “Tonight We Fly” del álbum
Promenade una mañana de bajón, no hay mejor remedio para combatir el mal
humor) y conmovedora, con unas melodías y canciones de amor que dan ganas de
llorar mientras cae la lluvia por la ventana.
The Divine Comedy invita en
cada uno de sus discos a una película sonora con sus momentos alegres y tristes
y un mismo protagonista omnipresente.
A pesar de la fuerte personalidad
del cantante, que le da un color único e incomparable a toda su obra, cada uno
de los álbumes de
The Divine Comedy tiene su interés propio. Después de
The Fanfare For the Comic Muse (1989), el primer trabajo de la banda,
Neil Hannon compone
Liberation (1993) y
Promenade (1994),
dos discos que confirman la originalidad y la creatividad de este artista que
conquistó rápidamente a un público que seguirá siempre fiel a su música.
The Divine Comedy: “The Complete Banker” (vídeo colgado
en YouTube por sighkid)
Tendrán que pasar tres años para que los
fans puedan escuchar el tercer álbum de la banda,
Casanova, un disco
ambicioso y potente de una gran calidad. El año siguiente, sale al mercado
A
Short Album About Love (1997), un disco con ocho canciones de amor
compuestas en pocas semanas, que dará lugar a una inmensa gira con orquesta
sinfónica. En 1998 sale
Fin de siècle (1998). El éxito mitigado de este
trabajo invita el artista a componer, con la ayuda de productor de
Radiohead, Nigel Godrich,
algo diferente, algo quizás más
común y más accesible para el público (y con más guitarras) que titulará
Regeneration (2001). En 2004, el disco
Absent Friends vuelve al
original estilo sinfónico y romántico de los años 90 en el que la voz de
Hannon es un instrumento clave. El último disco,
Victory For the Comic
Muse (2006), cuenta con un invitado de lujo, el multi instrumentista francés
Yann Tiersen, otro compositor de teatro para los oídos.
Respetando la línea de los discos anteriores,
Bang Goes to
Knighthood, el último trabajo de
The Divine Comedy,
está
compuesto por un lado de temas melódicos y románticos, y del otro lado, de
canciones espontáneas y divertidas.
Temas como “The Complete Banker”,
“
Neapolitan
Girl”, “
The Lost Art
of Conversation”, “Can You Stand Upon One Leg” o “I Like”
son buenos ejemplos del humor de este artista que se ríe del dinero, cuenta sus
aventuras debajo de la ducha o habla de mujeres en un tono cómico que recuerda
al del
cabaret de antaño. “At the Indie Disco”, el single que lanzó este
álbum al mercado, es un testimonio alegre de la juventud de
Neil Hannon y
de sus noches de baile y de ligue.
The Divine Comedy: “At The Indie Disco” (vídeo colgado
en YouTube por divinecomedyhq)Sin embargo, son los temas lentos
que hacen de
The Divine Comedy un grupo de excepción y de
Neil Hannon
un gran cantante. “
Bang
Goes the Knighthood”, el cuarto tema, es tan oscuro y
misterioso como une película de amor en blanco y negro que transcurre en el
Londres de los años 20. Los coros y el dramatismo del
estribillo, sorprenden tanto como conmueven.
“
Have
You Ever Been In Love”, la sexta canción, es agradable y
simpática. Los violines le dan el toque liviano y despreocupado de los recién
enamorados. Al contrario, el décimo tema, “
When
a Man Cries”, es extrañamente crudo y pesado, tanto en su
parte instrumental como en sus letras, reforzado por el sonido frágil y
enigmático de una cajita de música.
Pero una de las mayores
características de
The Divine Comedy es que incluso sus temas lentos y
románticos tienen una energía potente y contagiosa como en el primer tema,
“
Down
In the Street Below” que a pesar de su tristeza dan ganas
de saltar. Otro ejemplo es la séptima canción, sin duda una joya y uno de las
mejores de este álbum: “Assume the Perpendicular” con una melodía y un ritmo que
atrapan y dan enseguida ganas de cantar.
The Divine Comedy es sin
duda uno de los grupos más originales del panorama musical actual. Solo por eso,
es un placer descubrir las nuevas ideas de
Neil Hannon, un artista
completo, que compone tan bien como interpreta su arte. Tanto humor y
sensibilidad en un mismo hombre no puede dejar indiferente…
The Divine Comedy: “Assume The Perpendicular” (vídeo colgado en YouTube
por 1987victorbc)