lunes, 27 de septiembre de 2010
Muerte y resurrección del periodismo: Molly (historia sobre los centros de menores en Cataluña) y Lomboko (sobre el tráfico negrero)
Autor: José Membrive - Lecturas[{0}] Comentarios[{1}]
Libros y autores en Blog personal por Libros
“Molly” (historia sobre los centros de menores en Cataluña) de Jesús Martínez y Gustavo Franco, y “Lomboko”, (una novela que relaciona el tráfico negrero con la situación actual) de Toni de la Rosa, constituyen sendos certificados de la defunción del periodismo subvencionado

José Membrive

José Membrive

Ediciones Carena presenta cuatro libros de los que el cincuenta por ciento no habrían sido escritos en una situación de normalidad informativa, pues ambos aluden a temas cuyo natural canal de tratamiento correspondería al periodismo y no a la literatura.

El primero, Molly, estaba concebido en principio como un reportaje sobre el dudoso sistema de la retirada de la custodia de niños a familias conflictivas (todas ellas pobres, aunque la conflictividad afecta por igual a todas las capas sociales), sobre el turbio trato que se dispensa a estos niños en las casas de acogida y, lo más sospechoso aún, sobre el sistema de adopción de estos niños puesto en práctica por algunos organismos oficiales.

La infancia es la edad que marca el futuro, la edad en la que somos más indefensos, la edad en la que el cariño es el alimento imprescindible para el crecimiento personal. Cambiar cuidadores por seguratas no es la forma más conveniente de convertir la niñez de los más desfavorecidos en la edad mítica que decide el porvenir. Una investigación sobre el asunto sería una fantástica manera de contribuir al saneamiento social. Sin embargo, ni se hace ni se facilita, sino todo lo contrario.

Las dificultades en la investigación concreta hacen aconsejable levantar el vuelo y mirar el asunto con perspectiva literaria. Al final, lo que debería ser reportaje se ha convertido en novela que, a modo de A sangre fría, de Truman Capote, versa sobre la realidad, pero trasciende los casos concretos que la originaron.

Con la metamorfosis, la obra sale beneficiada, porque si uno se ciñe a una hoja particular puede que ésta le impida ver el bosque. Lo de menos son los nombres y las circunstancias concretas, lo importante es que a esos nombres de niños perjudicados no se les vayan sumando otros impunemente.

Jesús Martínez y Gustavo Franco: Molly. Historia sobre los centros de menores en Cataluña (Ediciones Carena, 2010)

Jesús Martínez y Gustavo Franco: Molly. Historia sobre los centros de menores en Cataluña (Ediciones Carena, 2010)

Jesús Martínez y Gustavo Franco son sus autores, ambos periodistas enmascarados en literatos por mor de las circunstancias. El cambio de registro universaliza la denuncia, sin que pierda un ápice de intensidad. Libro recomendable donde los haya para hacer que supuren esos puntos infecciosos que pueden alojarse en cualquier recoveco social, sobre todo en lo que afecta a los indefensos.

La segunda novela Lomboko, de Toni de la Rosa, tampoco existiría si el puritanismo, la hipocresía y los intereses políticos no imperara sobre la información.

Al contrario que Jesús y Gustavo, dos periodistas transformados en novelistas, Toni de la Rosa es un novelista encarnado en un reportero “literaturizado”. La primera novela que publicó, La escuela rota (Ediciones Carena), es una denuncia inapelable de casos de racismo perpetrados sobre adolescentes, que el Departament d’Educació trató de enterrar informativamente.

Lomboko, nombre de una factoría negrera española, situada en el oeste de Sierra Leona, trata de la actividad como traficantes de negros, después de la prohibición de este tipo de comercio, de algunas de nuestras más ilustres sagas tanto catalanas como españolas. Pero la mirada del autor no se queda en el pasado, sino que se posa en el sibilino sistema de segregación “civilizada” que ponemos en marcha cuando el exceso de mano de obra barata hace prescindibles a quienes unos años antes dábamos trabajo “negro”. De todas maneras hablamos de una novela, una novela de las que nos hacen pensar. Tierna y dura al mismo tiempo.

Toni de la Rosa: Lomboko (Ediciones Carena, 2010)

Toni de la Rosa: Lomboko (Ediciones Carena, 2010)

Pero lo que llama la atención es que, como en tiempos del tardofranquismo, ahora comience a recurrirse a otros géneros literarios para sustituir el mutismo del periodismo oficial, que es todo.

Un periodista de La Vanguardia me decía, algo desengañado, que la función que se les encomendaba era la de restar importancia a las noticias no favorables al “lobby”, a base de enfatizar las fruslerías. En su obra Oficio de carroñero, Pablo-Ignacio de Dalmases rememora la vida de los periodistas de calle, una especie casi en extinción, sustituida por el periodista internetiano de “corta y pega”.

Se trata de un periodismo burocrático-subvencionado. Un periodismo que, cuando el poder lo necesita, funciona a golpe de pito (en todos los sentidos de la palabra), como lo demostró en Cataluña el editorial común sobre el apoyo al Estatut, cuando la mayoría de ciudadanos lo considera un asunto tan menor que no se dignaron ni tan sólo ir a votarlo.

La proliferación de libros que tratan de sustituir la fidelidad informativa hacia el poder establecido es un motivo de preocupación y esperanza. Estos y otros libros aseguran que el periodismo de raza sigue vivo, aunque, en este caso, esté fuera de las redacciones oficiales.


NOTA: En el blog titulado Besos.com se pueden leer los anteriores artículos de José Membrive, clasificados tanto por temas (vivencias, creación, sociedad, labor editorial, autores) como cronológicamente.