jueves, 25 de marzo de 2010
La Berliner Philarmoniker, la mejor orquesta sinfónica de la historia
Autor: Juan Antonio González Fuentes - Lecturas[{0}] Comentarios[{1}]
Artes en Blog personal por Música
Corría el año 1882 cuando un director de orquesta de nombre aristocrático, Hans von Büllow, hacía música con unos instrumentistas que tomaron una decisión hoy de enorme trascendencia en el mundo de la música clásica del siglo XX: fundar una orquesta, la Berliner Philharmoniker, la Orquesta Filarmónica de Berlín, la orquesta que sumando puntos en el ranking de las mejores orquestas de la historia es considerada la mejor de todas, por delante de otros conjuntos míticos como la Filarmónica de Viena o la Orquesta del Concertgebouw de Ámsterdam, hoy la mejor orquesta del mundo mundial según un reciente ranking que ya se publicó en estas páginas


 

Juan Antonio González Fuentes

Corría el año 1882 cuando un director de orquesta de nombre aristocrático, Hans von Büllow, hacía música con unos instrumentistas que tomaron una decisión hoy de enorme trascendencia en el mundo de la música clásica del siglo XX: fundar una orquesta, la Berliner Philharmoniker, la Orquesta Filarmónica de Berlín, la orquesta que sumando puntos en el ranking de las mejores orquestas de la historia es considerada la mejor de todas, por delante de otros conjuntos míticos como la Filarmónica de Viena o la Orquesta del Concertgebouw de Ámsterdam, hoy la mejor orquesta del mundo mundial según un reciente ranking que ya se publicó en estas páginas.

Ya he escrito en diversas ocasiones que esto de los listados para establecer quién o qué es lo mejor de la historia en determinado campo es, en sí mismo, una estupidez, pues siempre entran en juego tantos y tan diversos factores que es imposible llegar a conclusiones fiables. En este mismo caso, sin ir más lejos, habría que empezar por subrayar que la Filarmónica de Berlín no es orquesta de foso operístico, con lo que quizá ya no debería figurar entre las mejores orquestas especializadas en tocar y grabar ópera. En fin, sigamos con la disertación.

Lo que sí es evidente es que a lo largo de sus más de cien años de vida la Filarmónica de Berlín se ha erigido como un referente ineludible en el entramado de la música clásica de la centuria. ¿Las razones? Dejo aquí apuntadas algunas muy probables. Tan sólo 7 directores titulares a lo largo de sus 128 años de existencia, a una media de casi dos décadas por director. Y estos siete directores siempre han figurado entre los más grandes del momento, por no subrayar que en su etapa, por distintos motivos, siempre fueron considerados los más grandes: Hans von Büllow, Arthur Nikisch (quien dirigió el conjunto durante casi treinta años), Wilhelm Fürtwangler (sin duda uno de los mitos de la dirección orquestal del siglo XX), Sergiu Celibidache (el rumano fue quizá el director más interino de todos, pues ocupó el cargo durante los procesos de desnazificación), Herbert von Karajan (el artífice de la explosión mediática de la orquesta y el responsable de su definitiva elevación a los cielos orquestales), Claudio Abbado (el maestro italiano fue el primer director titular no centroeuropeo de la orquesta, y el primero que dejó el cargo, de carácter vitalicio, por decisión propia) y sir Simon Rattle (el director británico es el actual titular, y a quien le ha tocado el difícil reto de manejar el más sofisticado y potente conjunto musical existente en el panorama, manteniendo un nivel en verdad casi imposible de superar).



Herbert Von Karajan dirige a la 3ª Sinfonía (Heroica) de Beethoven (vídeo colgado en YouTube por VIVUMUSICA)

Otras razones que pueden apuntarse son las siguientes: nada más y nada menos que 126 directores del siglo XX son los que han logrado grabar música con la orquesta; orquesta que es, de largo, la que más discos ha realizado a lo largo del tiempo y con un repertorio más amplio: se contabilizan más de 1.344 discos de estudio y en vivo y en directo con música que va, por ejemplo, desde Mozart (el más grabado con 220 registros) a Arnold Schoenberg (11 discos), pasando por el también omnipresente Beethoven (212 discos) o los españoles Manuel de Falla (tan sólo 1 disco) o Pablo Sarasate (5 registros).

Ya se ha mencionado que en la instalación de la Filarmónica de Berlín en el Olimpo orquestal del siglo XX tuvo mucho que ver Karajan. Y tuvo que ver por dos razones principales: era un director de orquesta genial, con una personalidad absolutamente indiscutible, y era un hombre de negocios excepcional, un visionario atento al poder de las nuevas tecnologías y de lo que éstas podían hacer tanto por la difusión de la mejor música jamás escrita como por el “negocio” musical, es decir, discos, dvds, conciertos, marketing, mitomanía...

Karajan comprendió enseguida que las nuevas tecnologías que se estaban desarrollando iban a posibilitar que la música llegase a millones y millones de personas: era un reto cultural, y también, insisto, un negocio de miles y miles de millones. Karajan y su orquesta berlinesa grabaron 521 piezas y vendieron más de 200 millones de discos mientras duró su relación, es decir, hasta 1989, año de la muerte del maestro. Karajan apostó fuerte por las grabaciones de los conciertos tanto en audio como en vídeo (en este sentido fue un auténtico visionario), inventó la promoción de discos y conciertos y se atrevió con todas las producciones sinfónicas de casi todos los grandes, con Mozart, Beethoven, Brahms y Tchaikovsky en primer lugar.

En 1981, cuando todo el modelo industrial de grabaciones audiovisuales estaba dirigiéndose a un cambio radical en sus formas y tecnología, Karajan fue invitado a participar en la rueda de prensa de presentación del nuevo invento audiovisual, el Compact Disc, “objeto” creado por las multinacionales del sector Phillips y Sony. El director, con su mayestática presencia y su prestigio (el más incuestionable del orbe musical universal), avalaba así la irrupción traumática de la nueva tecnología. Hoy, se ha subrayado en no pocas ocasiones, la apuesta de Karajan puede parecernos fácil y de una obviedad escandalosa, pero en su momento fue una apuesta arriesgadísima. Karajan y Berlín, por supuesto, fueron quienes grabaron el primer CD comercial de la historia.

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Últimas colaboraciones (Marzo 2010) de Juan Antonio González Fuentes en la revista electrónica Ojos de Papel:

LIBRO: Patrick McGilligan: Biografía de Clint Easwood (Lumen, 2010)

CINE: Martin Scorsese: Shutter Island (2009)

LIBRO (febrero 2010): Oliver Matuschek: Las tres vidas de Stefan Zweig (Papel de Liar, 2009)

LIBRO (enero 2010): Alex Ross: El ruido eterno. Escuchar al siglo XX a través de su música (Seix Barral, 2009)

CINE (enero 2010):  James Cameron: Avatar (2009)

LIBRO (diciembre): Gerald Martin: Gabriel García Márquez. Una vida (Debate, 2009)

-LIBRO (noviembre): Miklós Bánffy: Los días contados (Libros del Asteroide, 2009)

-CINE (noviembre): Woody Allen: Si la cosa funciona (2009)

-LIBRO (octubre): Luis García Jambrina: El manuscrito de piedra (Alfagaura, 2008)

-CREACIÓN (octubre): La lengua ciega (DVD, 2009)

-CINE (octubre): Isabel Coixet: Mapa de los sonidos de Tokio (2009)

-LIBRO (septiembre):  P.D. James: Muerte en la clínica privada (Ediciones B, 2009)

-LIBRO (julio): Stieg Larsson: Millennium 3. La reina en el palacio de las corrientes de aire (Destino, 2009)

-PELÍCULA (julio)Niels Arden Oplev: Millennium 1: Los hombres que no amaban a las mujeres (2009)

Más de Stieg Larsson:

-Millenium 1. Los hombres que no amaban a las mujeres (Destino, 2008)

-Millennium 2. La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina (Destino, 2008)


NOTA: En el blog titulado El Pulso de la Bruma se pueden leer los anteriores artículos de Juan Antonio González Fuentes, clasificados tanto por temas (cine, sociedad, autores, creación, historia, artes, música y libros) como cronológicamente.